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Habría muchas cosas que Nemesio Cuevas y Felisa Soberón no entenderían del Pumareña de hoy, tan diferente al pueblo que ellos conocieron. Seguro que nunca imaginaron que en ese mismo pueblo, 73 de sus descendientes harían maravillas para poder reunirse en el mismo pueblo donde ellos nacieron, vivieron y murieron. Pero lo cierto es que esta hazaña comenzó a forjarse hace ya más de 100 años cuando ambos se casaron en la parroquia de San Pedro de Bedoya y formaron una familia en el pueblo de Pumareña.

Era difícil el poder reunirse todos los descendientes, pero no imposible; siempre puede surgir algún impedimento. Gracias al arraigo a la tierra y a que buena parte de sus descendientes veranean en la tierra de sus abuelos, de ese modo se pudo reunir a buena parte de ellos para celebrar este primer encuentro. Apenas se hablaba de esfuerzo, solo se oían risotadas y felicitaciones por el reencuentro. Desde el mayor, José Prieto con 101 años hasta el más pequeño, Lucas Cantero con un mes. Algunos nunca se habían visto, sin embargo fue tanta la familiaridad y la camadería que ya se fijó una fecha para el próximo año volver a repetir el encuentro. Será el sábado día 22 de Agosto del 2.009. Merece la pena.

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Fotos: Tania