Los accesos a Salarzón y Pumareña

Los vecinos de Salarzón y Pumareña corren un serio problema con sus accesos viales por la presencia de socavones, baches, grietas y riesgo inminente de argayos. Menos mal que este invierno pasado fueron escasos los temporales, pero, si no se ponen remedios, es fácil que en cuanto lleguen de nuevo las lluvias, ambos pueblos pueden quedar incomunicados.

Salarzón

La presencia de innumerables grietas en la carretera hace muy probable que a la mínima el pueblo quede confinado. Solamente hace falta que llegue un pequeño temporal para que Salarzón se quede sin carretera por al alto riesgo de desprendimientos.  

Pumareña

Pumareña es uno de los pocos pueblos lebaniegos que carece de carretera. Así, como suena. Sus accesos se limitan a un camino que en el año 2005 se le echó una capa de asfalto y así seguimos. El hundimiento del pavimento en algunos tramos es palpable, lo cual entraña grave peligro para los vehículos que circulan por él y corre, además, el riesgo de dejar al pueblo incomunicado.

Ayuntamiento de Cillorigo

Ambos accesos dependen del Ayuntamiento de Cillorigo de Liébana y el sucesivo abandono de dichos viales por parte de dicho Ayuntamiento, dejarían, si llegan las lluvias, incomunicados a más de medio centenar de vecinos.

Carretera a Salarzón