Cuadrilla 31

La cuadrilla 31 bajó dos buenos jabalís de Vallejas

Bonita mañana la que amaneció en Liébana el pasado miércoles, cuando los componentes de la cuadrilla 31 hacían las presentaciones ante la guardería. Hoy toca cazar en el lote de Vallejas de San Pablo que está por la zona de Valmeo, Porcieda, Tudes...

Si hay que ponerle algún pero, era que corría un ligero viento sur y los jabalís con esa clase de viento ya sabemos todos lo que pasa. "Estuvimos la semana pasada en el monte y no hay muchos jabalís, pero suficientes para pasar un día divertido", les explicaba un eufórico Fran, el jefe de la cuadrilla. "Hoy vamos a cerrar desde Cabariezo hasta el prao de los Hoyos y desde el estrecho de Porcieda hasta el pico Cutriales. Los monteros entrarán por Lubayo, Bobaliego, Valmenor, Valmayor y Valmeo".

Llevaban ya más de una hora en el lote y nadie cortaba nada, solamente alguna demanda vieja que los perros enseguida abandonaban. Por fin, a las once de la mañana fue Roberto el que avisaba por la emisora: "Atentos que aquí levantó el perru miu, va muy apurau y es un jabalí bastante buenu, le acabo de ver...". Pero nadie comentaba más. A la media hora, por fin, se oye un disparo por encima de Lubayo. "¿Quién tiró?", preguntaba Fran. Y la callada como respuesta. Nadie hablaba, parecía una cacería de mudos. Al cabo de un rato, por fin se oye: "A ver Fran..., es que Bauti no tiene emisora, pero me acaba de llamar por el móvil y dice que mató un jabalí muy grande y que ya llegó el perru de Roberto a morder", le explicaba Tasín a su jefe. Y tuvieron bien dónde morder, porque el jabalí dio en báscula los 105 kilos.

Al poco rato, de nuevo avisan por la emisora: "atentos que los perros míos ya levantaron, atentos los que estáis por debajo de Porcieda". El que así se explicaba era Angel Gutiérrez. Y a la media hora le avisaba Paco: "aqui acaba de pasar el perru tuyu de levante, se me tuvo que pasar el jabali por algun lau, pero no fui capaz de verle".

También levantó Luis cerca de Valmayor, pero los perros no hicieron mas que dar vueltas en un bardal hasta que se cansaron. "Tienen que ser unos marranucos pequeños, pues los perros se hinchan a dar vueltas y de aquí no salen", avisaba el montero.

Era ya mediodía cuando informaba José María, el de Casillas: "atentos que se me acaba pasar un jabalí, me entro por la espalda y entró a la cacería. Cuando le quise encarar ya se metió en el monte". No tardaron ni dos minutos en oírse tres disparos. Era Tino el de Frama, que venia de invitado, y  avisaba: "atentu Angel (el de Ceto) que va pa onde estás tu. Va heridu, le pegué en la parte de atrás". Y al momento se oyen otros tres disparos y se oye por la emisora: "Ya esta Tino, ésti ya cayó", le respondió Angel que fue el encargado de rematarle.  No era tan grande como el anterior, pero tampoco era malo, pesó 75 kilos.
Pasaban ya las dos de la tarde y en vista que allí no había más tela que cortar, Fran les avisa: "Vamos a cambiarnos y echar la mata de Tudes".  
Entraron los monteros y no hubo manera de coger ni una demanda. Solo Angel decía: "aqui corté unas demandas pero se salen de la cacería, se pasan pa Fonfría y Picojaro". Eran ya las cinco de la tarde, cuando Fran, en vista que allí ya no se hacía nada, pues se había andado todo el monte, avisa a todos: "vamos ya a retirarnos, así que recoger los perros y nos vamos todos hasta Ojedo, donde los Guardo, a pesar los jabalís y a ver si tiene algo para picar".

Con una buena merienda se dio por concluida la jornada. En realidad se esperaba algún resultado mejor, pero tampoco se dio tan mal.

(Datos y fotos aportados por Fran)

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